Estemos alegres!

Salmos 5:11... Pero alégrense todos los que en ti confían; den voces de júbilo para siempre, porque tú los defiendes; en ti se regocijen los que aman tu nombre.

La actitud que traerá bendiciones de Dios para nuestras vidas es: “Alegrarse” donde quiera que estemos y cualquiera que sea mi condición.

Es muy fácil tener alegría en nuestros corazones cuando todo va bien y cuando Dios nos provee de todo lo que estamos necesitando.

Pero, cuando estamos esperando aquello que Él todavía no nos ha provisto, tenemos que tener paciencia, y saber esperar su tiempo con alegria hasta que el resuelva nuestros problemas. El alegrarnos resulta muy difícil. La confianza en Dios y en lo que el hará aunque no lo entendemos, es lo que hará que tengamos la alegría y el contentamiento por quien es El, y por lo que ha hecho en nosotras y eso nos dará el agradecimiento para seguir esperando en Él.

Estar alegres y gozosos no significa estar solamente riendo y saltando de gozo físicamente, sino experimentar gozo en nuestros corazones y pensamientos, que es a lo que siempre debemos apuntar porque si dejamos que los pensamientos negativos, el temor, la ansiedad o la angustia tengan el control en nuestras vidas; entonces estamos perdiendo el gran desafío de estar gozosos y confiar en el Dios de nuestra salvación.

No hay tristeza que dure para siempre. Dios remplaza la tristeza en baile. En el momento no lo entendemos pero llegara el día que tu corazón rebose de alegría. ¡Alégrate alma mía, porque el que da verdadera alegría está aquí para llenarte!

4 Estén siempre llenos de alegría en el Señor. Lo repito, ¡alégrense! Filipensenses 4:4.